2007-10-20.
Álvaro Yero Filipe, Periodista Independinte, Agencia Libre Asociada (ALAS)
Sí, amigos míos, así andan las cosas por Cuba hoy. Los equipos
electrodomésticos vendidos por el Gobierno al pueblo, se reconocen entre
la población con los sobrenombres de: "cocina-desodorante", por las
veces que hay que llevarlas al consolidado a arreglarlas, andando de
aquí para allá, debajo del brazo; "refrigerador llovisnao", por las
constantes lluvias dentro del aparato, después de dos horas sin abrirlos.
El sudor del frío se congela y al abrirlo comienza la depresión
tropical. Y de las ollas, en "jaque mate", pues las mayoría de estas
ollaseléctricas ina'!, en jaque mate, ya queman todo lo que cocinan, y
que decir de la presión que ya no le sube, pero de todas formas siempre
se sienten mal en la cocina.
Como dice el comentarista internacional de la televisión cubana, Fritz
Suárez Silva, "El programa de ahorro energético lanzado por el gobierno
para beneficio del pueblo, deja mucho que desear"; y sí, han puesto
estos nombres satirizando a esos equipos del hogar que el Gobierno una
vez aseguró, eran de máxima calidad.
Los ciudadanos en las calles de la Isla se preguntan: Si ya se emprendió
un programa de electrificación, si ya se pusieron plantas eléctricas,
con el "petróleo chavista", ¿por qué seguimos con los apagónes a cuesta?
Estos apagones por supuesto, son los causantes de las rotura de muchos
equipos útiles en el hogar, incluidos los que ya mencionamos, que dicho
sea de paso, no son de "la mejor calidad", pues ya el 20 % de los
ciudadados han reportado frecuentemente roturas de algunos de ellos.
Entiéndase (mundo): muchos de los cubanos (la mayoría), cocinaban con
combustible, gas licuado y mucho querosene o luz brillante, como se le
conoce, al recibir (comprado) estos equipos electrónicos les fueron
retirados estos combustibles dados por la libreta de racionamiento.
Algunos comentan hoy, que en cualquier momento la electricidad también
se dará por la mencionada libreta, "cosas de locos" ¿verdad?
– Se inmaginan ustedes...
–Aunque, yo creo que a nuestro comandante ya se le ocurrió alguna vez,
así que no me extraña que a los cubanos se les ocurra también.
Lo jodido del caso es que a cada rato a la cabeza pensante de la
revolución cubana, se le ocurre una locura distinta. Y si le diera por
producir biocombustible, a joder iotra vez!; pues después, nos quedamos
en la calle sin llavín (sin reinas), sin las "cocinas desodorantes" y
sin las llovisnitas del refrigerador. iNa', estas son las cosas y casos
del caso casón cubano.
http://www.miscelaneasdecuba.net/web/article.asp?artID=12236
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