Tuesday, October 16, 2007

DERROCHE DE COMBUSTIBLE

DERROCHE DE COMBUSTIBLE
2007-10-16.
Hugo Araña, Bibliotecario y Periodista Independiente, Corresponsal en la
isla de Misceláneas de Cuba

En cuanta reunión efectúan los dirigentes del régimen, así sea al nivel
nacional, como municipal, la iniciativa de ahorro está a la orden del
día. Ya casi es como una obseción. El ejemplo más claro fueron las
palabras del Ministro del Transporte, Jorge Luis Sierra en el taller de
Experiencias de los Trabajadores Sociales.

Según sus declaraciones, puntualizó que "el descontrol hay que atajarlo
con mano dura, eficiencia y responsabilidad por parte de los consejos de
dirección".

Sin ebargo, el Ministerio de Transporte, que se mueve y vive con el
conbustible a cuestas para llevarlo a cabo, en cierta forma, desarrolla
no algo, sino bastante.

Pongamos por ejemplo el caso que ahora señalamos: lo que sucede en la
terminal llamada La Coubre. Allí los ómnibuses que inician su recorrido
desde la terminal hacen una parada en La Coubre para llevarse a
personas, que en las listas de espera, pueden conseguir algún asiento y
llegar a sus destinos, cuando no pudieron realizar las reservaciones
pertinentes.

Y es ahí donde la demora por llamar por el orden en la cola y vender el
boletín se extiende más de lo debido, a pesar de que en dicha Terminal,
hay cuatro casillas para atender estos casos. Sólo que por esto o por
aquello, de las cuatro para efectual el sencillo trámite de vender el
boletín, siempre hay una o dos vacías.

Y como es lógico, esta parada de los ómnibus que no debiera durar ni
quince o veinte minutos como máximo, llegan a veces al exorbitante
tiempo de una hora y media o dos horas. Mientras dichos transportes, no
apagan los motores. Resultado: el gasto de combustible se incrementa.

La impresión que cualquiera, al menos el avezado en el asunto del
derroche de combustible en esta situación, ninguno de los responsables
lo ha tenido en cuenta, o no le ha importado.

Con el resultado, que los horarios que debería durar un trayecto de cada
ruta, se alarga, y dichos ómnibuses, lógicamente, no pueden llegar a
sus destinos a la hora dterminada.

Esto viene sucediendo desde hace bastante tiempo en la terminal habanera
de La Coubre. Con la conclusión por lo observado que ningún dirigente de
este Ministerio tan importante para la vida del País parece que lo tiene
en cuenta, o se pudiera pensar en algo peor todavía.

http://www.miscelaneasdecuba.net/web/article.asp?artID=12171

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