10-10-2010.
Jaime Leygonier
Periodista Independiente, Hablemos Press
(www.miscelaneasdecuba.net).- Estudiosos de la historia del movimiento
insurreccional cubano (1954-58) que llevó a Castro al poder consideran
plagiario y plagado de errores el libro atribuido a Fidel Castro, de
venta en las librerías a precio inusualmente alto y publicado por
capítulos en el periódico Granma.
El periodista independiente Carlos Ríos Otero ya escribió sobre como
estas supuestas memorias son plagiarias de los escritos de Ernesto
Guevara (el Che), Almeida y otros participantes en la insurrección que
recopilaron datos y publicaron hace años - incluido Hubert Matos, el
temprano opositor a la dictadura naciente de Castro.
Un profesional de la Historia que participó en investigaciones oficiales
sobre la guerrilla de Castro en La Sierra Maestra me explica:
"Con un mapa de la Sierra Maestra uno comprende que el primer año de la
guerrilla (Diciembre de 1954 - 1955) vagaban por el territorio rehuyendo
un encuentro con el ejército. El testimonio de los participantes es
inexacto porque no conocían la zona e ignoraban a donde iban y venían.
Los primeros que investigaron ese reguero de líneas en el mapa lo
endulzaron cortésmente como "marchas y contramarchas estratégicas".
Fidel Castro no llevó ningún diario como si hizo el Che (Ernesto
Guevara). En los años 60 Celia Sánchez, la colaboradora más cercana de
Castro, archivó informes de investigaciones con testimonios de los
participantes pero no se sabe que hicieron con esa información que no
fue publicada; de suerte que el mismo Fidel Castro no es una fuente
confiable.
En el libro él relata que salieron de tal punto y llegaron a tal otro y
cuando uno consulta el mapa encuentra que esas marchas son imposibles
en una jornada. Es un reescribir la Historia; también hace pocos años
"descubrieron" fragmentos "inéditos" del folleto de Fidel Castro "La
Historia me absolverá"(1953) Siempre que publicaban libros políticos les
ponían precios bajos, pero éste nuevo cuesta $35 pesos. Es cierto que el
libro es plagiario, una alfombra de retazos, pero no aporta sino mayor
confusión y lo único nuevo es que Fidel Castro atribuye los éxitos a sus
sabias decisiones, culpa de los fracasos a los comandantes, incluyendo
al Che Guevara, porque no ejecutaron o "no comprendieron" sus ordenes y
todo es "Yo, Yo y Yo"".
También hay quienes cuestionan que Fidel Castro sea autor de este libro
y de la columna "Reflexiones del Comandante" puesto que en público su
discurso muestra incoherencia. - De suerte que, como en "La victoria
estratégica", la culpa de los errores la cargarán otros, los escribas de
la corte.
En los años 70 el Gobierno dispuso entrevistas a veteranos y acopio de
sus testimonios sobre la lucha clandestina en las ciudades, pero esa
información también duerme en archivos.
Entre profesionales de la Historia esta extendida - en voz baja - la
opinión opuesta a la oficial de que la lucha urbana clandestina llevó
el peso del derribo de la dictadura del general Fulgencio Batista - a
quien Castro sustituyó - mientras que la guerrilla jugó un papel
secundario.
Veteranos de las luchas clandestinas entrevistadas en los años 70,
sospecharon que el objetivo de esa investigación no era recoger sus
testimonios para una Historia que jamás escribieron sino un censo
policiaco de los ex-miembros de células y sus relaciones entre sí,
hecho en momentos de crisis política en que Castro temía ser combatido
por los revolucionarios.
Hechos históricos tan notorios como el ataque al cuartel Moncada por un
grupo de revolucionarios dirigidos por Fidel Castro (1953) que lanzó a
éste al estrellato político, jamás han sido explicados ordenadamente en
libro alguno y los relatos sobre ese acontecimiento son fragmentarios e
incurren en contradicciones.
Tampoco fueron publicadas jamás las notas taquigráficas del juicio
seguido contra Castro y los atacantes del cuartel, para comprobar en
cuanto coinciden o divergen de "La Historia me absolverá", folleto con
el supuesto recuerdo de Castro sobre su alegato en este juicio.
El Régimen desde sus primeros días se dio a rehacer toda la historia
nacional con fines de propaganda y culto a la personalidad y cuando el
fin no es la investigación de los hechos sino obtener "victorias
estratégicas" ! mal les va a las "ciencias sociales"!
Y peor a las "memorias de Santa Elena" de un régimen decrépito que son
acogidas con medias sonrisas por los profesionales y con apatía por un
público agobiado de problemas y harto de glorias - adjetivas y no
objetivas- de quienes crean sus problemas.
http://www.miscelaneasdecuba.net/web/article.asp?artID=30198
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